lunes, 26 de mayo de 2014

Frio y calor Granaino


Corredor Norte Cerro de los Machos(3.329m.), Zacatin(3.320m), Campanario(3.329m), Salon(3.325m), Veleta(3.396m)

Cinco de la mañana, abro los ojos y no quieren abrirse, me encuentro en un lecho poco habitual cosa últimamente habitual en mi vida, una actividad muy interesante nos espera y eso hace que los ojos por fin puedan abrirse, no se quien se alegra mas, si yo o los pinchos que parece que van a salir después de muchos años de la oscuridad del armario, así que no sin esfuerzo los levantamos Oscar y yo para ir preparando el desayuno de reyes mientras Andrés desmontaba su queridísimo vivac en su prado preferido. Con una buena dosis de cafeína para la mente y con todo tipo de nutrientes para el cuerpo las piernas empiezan a andar de manera autónoma, parece que ellas sepan lo que tienen que hacer pues la mente adormecida todavía no esta a su altura. No recordaba yo esa sensación de las monótonas aproximaciones que aunque uno vaya acompañado de buenos compañeros al final la compañera estrella es tu conciencia, con la cabeza baja el fluir de pensamientos entremezclados es lo único que rompe el  ritmo repetitivo de un paso tras otro, eso si, aderezado normalmente por paisajes o amaneceres increíbles.


Los primeros rayos del sol acarician nuestra cara al mismo tiempo que a uno se le hinchan los pulmones de aire de vida y hace que los pensamientos negativos que le han acompañado hasta ese momento sobre si vale la pena madrugar y cansarse cobren sentido.


Las previsiones metereológicas empiezan a no cumplirse, fuertes vientos hacen que uno tenga que ir corrigiendo su trayectoria y volviendo a colocar el centro de gravedad en su sitio para proseguir el camino, las nubes pasan por las cumbres a una velocidad de vértigo, el mismo vértigo que le produce el imaginar esas fuertes rachas andando por la cresta elegida.

Miradas y comentarios de duda sobre que hacer antes de iniciar el rapel a los corrales del Veleta se apoderan de minutos de incertidumbre pues el tiempo no pinta bien. La decisión  es que vamos a hacer lo menos comprometido descartando la cresta que une Los Machos con el Veleta.

Oscar flipando con la Norte del Veleta, da lo mismo las veces
que la hayas visto, siempre impone.
Rapel al canto con encanto, a pesar de la época en la que nos encontramos el ambiente es muy alpino empezando a disfrutar nada mas pasar las cuerdas por el descendedor.


Recogiendo las cuerdas del rapel a los corrales

La travesía hasta la entrada del corredor elegido se hace cansina mas que nada por el repetido angulo al que se ven sometidos los tobillos al andar en media ladera, una vez en la entrada todo cambia, sobre todo la cara, la babica cae al mismo tiempo que la sonrisa de oreja a oreja aumenta. Ademas parecía que la velocidad de las nubes que desgastaba las cumbres iba disminuyendo y la meteo empezaba a tomar matices optimistas.

El corredor en si nos lo encontramos en buenas condiciones, no excelentes pero si buenas dandonos la posibilidad de poder elegir el manto sobre el que progresar, mas o menos durito permitiendo ir alternando técnicas de progresión y hacer la subida menos pesada para nuestros amigos los gemelos.

Inicio del corredor

El estrechamiento con gran cantidad de nieve hizo que al final no tuviéramos que utilizar las cuerdas cosa que hizo que avanzáramos y ganáramos bastante tiempo.

Andres encabeza buscando hielo donde sacar las cuerdas

Oscar previsualizando el recorrido

Lo peor....pues de la salida del corredor a la cumbre de los Machos, ya que sin vistas apenas tenia encanto, pero estando allí como no íbamos a subir? Se trataba de hacer los Machos no? pues como tres gorilas de manada dominante golpeándose el pecho hicimos la cumbre del Cerro de los Machos(3.329m)

Gorilas en la niebla.



Viendo que el tiempo aguantaba aunque a mi me daba la impresión de que mejoraba lentamente decidimos ir a buscar entre la niebla la cresta que pasa por las cumbres de Zacatin(3.320m), Campanario(3.329m) y Salon(3.325m) para salir por la vía Fidel Fierro al Veleta(3.396m).



Ahí se produjo uno de esos momentos donde uno después de verse inmerso en la niebla durante horas de repente se abre un medio claro y te muestra la belleza de la montaña, apareciendo, cumbres, crestas, valles...momentos que duran segundos pues la nube protege esa belleza como si fuera suya y guarda celosa para que no te enamores de ella demasiado, durante unos segundos apareció la cresta del Campanario rodeada de un ambientazo...Andrés pregunta... subimos? pues ya ves...Otra vez la sonrisa de oreja a oreja.



No se como sera la actividad en otras condiciones pero el ambiente que nos acompañó y la ruta elegida me parecieron realmente preciosos. Cresteo por aquí, cresteo por allá...cumbre por aquí y cumbre por allá.





El final? pues cada vez mas cerca, Fidel Fierro y Veleta recordándonos la aberración medioambiental que hay en su cumbre. La bajada con piloto automático puesto hasta el vehículo que nos esperaba con cervezas frías, no se me olvidara jamas la cara de un grupo de excursionistas que llego al parking de la Hoya de la Mora cuando nos vio comiendo un plato de macarrones mientras medio nevaba y claro yo pensaba por dentro...si es que somos machos jajajajaja.

Un par de cafés con leche en un bar bajando de la sierra para recuperar el calor y volver a dopar la mente hicieron de compañeros en la tertulia sobre lo que haríamos al día siguiente. Escalada deportiva? Pues ala, vamos a Diezma y así estamos mas cerca de casa. No voy a dar detalles del homenaje gastronómico de la cena pues ya se sabe que en esta tierra se come bien, con un inicio tímido del típico caña tapa la cosa acabo....

Eso si, de madrugar nada, Granada nunca defrauda, poder estar pinchando hielo y en cuestión de minutos poder estar escalando sin camiseta no tiene precio. Aquí van unas imágenes del cocodrilo, un gendarme muy estético que nada mas verlo sentimos la necesidad de escalarlo y fotografiarlo.





¿alguien ve al perro que mira cabreado al escalador que sube a su amigo el cocodrilo?








Resumen....poco voy a decir, un fin de semana de esos que hacen que te sientas muy vivo, con motivaciones, ilusiones, sueños, viajes....deporte, naturaleza e inmejorable compañía.